Caudales altos y aguas frías marcan la apertura de la veda el 31 de marzo en los ríos leoneses La provincia cuenta con más de 40.000 practicantes.

Los ríos leoneses empezarán desde este sábado a poblarse de pescadores. La temporada levanta el telón y lo hace después de unos meses de espera para miles de ellos que a lo largo de cuatro meses podrán dar rienda suelta a su afición con la trucha como pieza estrella y más codiciada. Y también con la pesca sin muerte ganando cada vez un mayor protagonismo.

En los primeros días de la veda en la provincia los pescadores se van a encontrar en la mayor parte de los casos caudales altos y también revueltos así como aguas frías. Incluso en los ríos regulados. No obstante, esta circunstancia no será inconveniente para que desde primeras horas de la mañana del día 31 ríos como el Órbigo o el Porma cuenten ya con presencia de los primeros madrugadores en una campaña que presenta escasas novedades respecto a la precedente y que concluirá, salvo excepciones, el 31 de julio.

Entre ellas destaca la ampliación de zonas trucheras según lo establecido por la Orden FYM/309/2018. Así, para la provincia de León, en el caso del río Esla se actualizan los límites conforme a la actual denominación de la red de carreteras. Como novedad, se incluyen como trucheras las aguas del río Bernesga desde el puente de Carbajal de la Legua en la LE-5504 hasta su desembocadura en el río Esla, así como todos sus afluentes en este tramo, de manera que el tramo urbano de la ciudad de León adquiere la condición de aguas trucheras. En el caso del río Torío desde el puente de Villanueva del Árbol en la N-621 hasta su desembocadura en el río Bernesga y todos sus afluentes en este tramo adquieren igualmente esta condición. En el río Órbigo se incrementa también la longitud de las aguas trucheras hasta la confluencia con el río Jamuz y las aguas que afluyen a este tramo, excepto las masas de aguas contenidas en la orden anterior junto con las Lagunas de Valderrey, el embalse de Benamarías y las Lagunas de San Juan de Torre. Respecto a la pesca a la leonesa el coto de Valdepélago, como sucediera el pasado año, seguirá siendo de uso exclusivo para ella.

Y en cuanto a los caudales y capacidad de los ríos, las precipitaciones de las últimas semanas tanto en forma de lluvia como de nieve posibilitarán que la temporada transcurra con perspectivas halagüeñas.